El problema de la logística inversa en Chile
Las devoluciones, reintegros y cambios son todavía el aspecto más complejo de administrar en el entorno del ecommerce. Un reciente análisis de la empresa Welivery dice que, en Chile, los números tienden a subir. El año pasado gestionaron alrededor de 2.500 devoluciones, en promedio hacen la devolución mensual de más de 300 paquetes y proyectan terminar 2022 con 3.600.
Desde este operador de última milla, que trabaja con Mercado Libre, Shopify y Tienda Nube, explican que, para una eficiente gestión de la logística inversa, es clave tener un sistema implementado como parte del servicio post venta. Este debiera aligerar la complicación de los cambios y devoluciones.
“En cualquier escenario, la logística inversa supone costos adicionales que exigen optimizarla. De su buena gestión, dependerá la experiencia del comprador y la imagen de una marca”, señala Guido Buscetti, CEO y cofundador de Welivery.
Agrega que, por ello, se necesita una sólida sistematización que permita ofrecer una política de devoluciones rentable y orientada al cliente. “Es un servicio que un operador logístico puede ofrecer y que debe gestionarse de una manera excepcional”, explica Buscetti.
Según el mismo estudio de la empresa, los consumidores valoran acceder a sus compras con la mayor celeridad posible, incluso si el costo de envío se encarece un poco. Señalan en Welivery que es clave contar con proveedores logísticos que incorporen tecnologías que posibiliten rutear los envíos, hacer tracking inteligente, cross docking, logística inversa y cuenten con integración de APIs.
Comentarios potenciados por CComment