El extraterrestre que sueña con vivir en la Tierra Destacado
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La campaña con que Greenpeace llama a salvar el planeta, en cuya creación participa BBK Group, se basa en un corto animado cargado de emocionalidad.
El mensaje de cuidar la Tierra está calando hondo en todas las esferas, ante una emergencia climática evidente. Más aún en este momento, tras haber celebrado recientemente el Día del Medio Ambiente, y con mayor fuerza desde las organizaciones cuyo centro es la defensa del planeta.
Greenpeace, una de ellas, acaba de presentar una animación en que hace este llamado. Un trabajo realizado en alianza con la agencia creativa chilena BBK Group, la productora audiovisual Lightfarm Studios de Brasil y la banda sonora original creada por Pickle Music Studios, de Nueva York.
El corto animado busca concientizar sobre el cuidado de la Tierra y la necesidad de protegerla antes que ir en búsqueda de otros lugares en el Universo. Y así justamente lo hace ver un personaje ficticio, un ser extraterrestre, cuya nave tiene la “fortuna” de caer en nuestro planeta.
El protagonista es Zoio, un simpático alienígena de un ojo, corta estatura, pelo verde y grandes orejas que tras el accidente comienza a explorar el planeta: descubre la nieve, camina por los bosques, observa los animales y bucea en el mar.
El planeta soñado
Para desgracia de Zoio, ese momento mágico termina cuando despierta y se da cuenta de que era un sueño, pues en realidad está en su planeta: un lugar del sistema solar, árido, rocoso, sin verde alrededor y desde donde observa la Tierra.
Ve, además, que los humanos se han apoderado de ese lugar y tienen una base espacial; los robots exploradores se pasean al mismo tiempo que aterriza un transbordador, cuando se lee el mensaje: “El planeta soñado ya lo tenemos. Antes de buscar otro, salvemos el nuestro. Súmate. Greenpeace”.
Comentando la pieza, Estefanía González, coordinadora de campañas de Greenpeace, dice que, si bien en el universo hay miles de millones de galaxias y en nuestra galaxia hay miles de millones de planetas, hay solo una Tierra.
“Estamos en un momento crítico, en que nuestros gobernantes deben adoptar políticas que protejan el planeta y nosotros recapacitar para cuidar nuestro ambiente y todas las especies. La ciencia ya lo ha dicho, el tiempo se nos está acabando, es momento de valorar dónde estamos y qué estamos haciendo para cambiar nuestras conductas”, dice.
Escala global de una idea
Agrega González que, en el caso de Chile, el llamado de Greenpeace implica, por ejemplo, “proteger el agua para las personas y la naturaleza, terminar con las zonas de sacrificio, mantener a salvo los océanos de industrias contaminantes”.
En Chile también, BBK Group enfrentó el reto de convertir un problema conocido en algo relevante. “Vimos una oportunidad en esta carrera espacial que están teniendo los multimillonarios mirando para afuera, cuando tenemos un planeta increíble adentro”, dice Matías Wolff, director general de la agencia.
Apenas vieron el potencial de su idea, conversaron con la productora brasilera Lightfarm Studios para trabajar un corto que llegara a los niveles afectivos más profundos. Mostraron el proyecto a Greenpeace, en Chile y Argentina, que de inmediato engancharon con la idea.
Si bien la campaña se inició en estos dos países, conforme el proyecto avanzaba se pensaba a escala global. “Es una pieza que no tiene texto –salvo las dos líneas del cierre– y está pensada para que tenga un lenguaje universal”, explica Wolff, contento por la mirada que BBK pudo aportar.
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