Aztro apuesta por campañas cargadas de experiencias Destacado
Una búsqueda constante de soluciones comunicacionales por parte de las empresas avisadoras, dada la saturación que sienten muchos consumidores respecto de la publicidad, es uno de los factores que estaría explicando el surgimiento de agencias que intentan alejarse del modelo tradicional.
La idea de trabajar en torno a la experiencia está presente en varios de los proyectos surgidos en el último tiempo. Como ocurre con Aztro, cuya propuesta de servicios incluye lo que llaman una publicidad integrada que abarca desde la investigación y la estrategia, pasando por el diseño y la producción, para llegar a los resultados.
Felipe Vargas y Cristián Toffolo son quienes encabezan, como socios y directores generales, esta agencia, de la cual señalan es capaz de producir sus propias creaciones, ocupando ideas, neuromarketing y la producción para crear “campañas más experienciales que aspiracionales”.
“Aztro entrega una comunicación que dan ganas de ver y compartir, con experiencias de vida de gente real”, comenta Felipe Vargas. En tanto, Cristián Toffolo dice que ellos han apuntado a una creatividad basada en el neuromarketing.
“Cuando la información registrada por nuestros cinco sentidos se acumula en el subconsciente y la experiencia es lo suficientemente fuerte, genera un sentimiento de afecto. En este punto, y a través de una serie de estrategias de marketing, podemos empatizar con las necesidades del consumidor y así suplir el miedo bajo un código simbólico”, explica Toffolo.
El mensaje se transforma entonces, según esta idea, en lo que llaman una experiencia, un decir que es más bien un hacer, que almacenada en el cerebro logra que se recuerde la marca y su posicionamiento.
Desde un simple post
La propuesta de Aztro tiene sus seguidores. Empresas como Petrobras, Chevrolet Coseche, Credicorp Capital, Espacio Riesco, Vitamina, Espacio Urbano, Santa Isabel, Viña Matetic y Derco se cuentan entre sus clientes.
Lo que Aztro señala buscar es que estas marcas conecten con sus clientes, ofreciéndoles una buena experiencia, utilizando las emociones y los sentimientos como base fundamental de la comunicación. Dentro de ese predicamento, la agencia ha desarrollado campañas que comienzan con un simple post que se convierte en viral, desarrollándose entonces una activación, y terminan en una web llena de vivencias reales.
Recuerdan el caso de Vitamina, sala cuna y jardín infantil. “En este caso, buscamos, a través de historias, relatos y testimonios, al Gran Corazón de Chile, esa mamá incondicional que debe ser premiada”, refieren.
Otro caso que Vargas y Toffolo consideran de éxito es el Drone Delivery, desarrollado para Sanguchería La Miga. Dada la falta de pedidos a domicilio, crearon un viral que mostraba a un dron despachando un pedido a un hambriento ejecutivo. Fue, según dicen ellos, un fenómeno que provocó que todos llamaran esperando recibir su sándwich en este nuevo soporte.
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