Cali Trivelli: La confianza, pilar fundamental para el éxito empresarial

En la era actual, marcada por un entorno en constante cambio y una creciente demanda de autenticidad, la confianza entre las empresas y sus clientes se ha convertido en un pilar fundamental para el éxito.

Su construcción no es solo una estrategia empresarial, sino una necesidad imperativa para las organizaciones que buscan prosperar en un mercado donde la transparencia y la responsabilidad son cada vez más valoradas por los consumidores.

En la última década, hemos visto un cambio notable en cómo las empresas gestionan la confianza. Sectores como las farmacias y los supermercados han mejorado significativamente su posición de confianza al enfocarse en proporcionar una experiencia consistente y de alta calidad.

El transporte público lo ha hecho al atender mejor las necesidades diarias de las personas, demostrando un compromiso real con la mejora continua y la satisfacción del usuario.

Sin embargo, este camino no ha sido sencillo. Muchas empresas aún enfrentan desafíos significativos para eliminar la desconfianza persistente en ciertos sectores.

Estrategias para construir confianza en la Economía del Propósito

En lo que llamamos economía del propósito, el impacto social y la búsqueda de un sentido más profundo en el trabajo y los negocios se vuelven prioritarios, y la confianza adquiere un nuevo significado. Los consumidores de hoy, no solo buscan productos y servicios de calidad, sino también empresas que compartan sus valores y contribuyan a la sociedad.

Para construir y fortalecer confianza, se pueden adoptar diversas estrategias:

• Transparencia proactiva: entender desde los clientes qué consideran ellos transparencia (para cada categoría es distinto), compartir información de manera proactiva y sincera, especialmente en situaciones difíciles, puede fortalecer la percepción de honestidad.

• Responsabilidad social y ambiental: Implementar políticas y prácticas que demuestren un compromiso con la sostenibilidad y el bienestar social. Esto es cumplir con regulaciones ambientales y laborales, pero también ir más allá, tomar iniciativas voluntarias para ser un aporte responsable.

• Atención excepcional al cliente: Proveer un servicio al cliente que escuche y responda a las necesidades y preocupaciones de los clientes puede mejorar la empatía y la cercanía. Capacitar a los colaboradores para que sean empáticos y resolutivos es clave en este aspecto.

• Relacionamiento y seguimiento: Ofrecer garantías sólidas y un seguimiento eficaz refuerza la sensación de respaldo. Los clientes deben sentir que pueden confiar en la empresa para solucionar cualquier problema con sus productos o servicios.

Convergencia de la Confianza y el Propósito

La confianza es más que un valor corporativo; es un activo estratégico que puede determinar el éxito o fracaso de una empresa en el mercado actual. Ser una organización que se gestiona desde la construcción de confianza y propósito no solo atrae y retiene clientes, sino que también motiva y compromete a los colaboradores, creando un entorno laboral más saludable y productivo.

En la economía del propósito, donde la autenticidad y el impacto social son fundamentales, las empresas que invierten en construir su propósito, y en entender y gestionar la confianza, estarán mejor posicionadas para ganar la lealtad de los clientes, el compromiso de sus colaboradores.

Y podrán prosperar a largo plazo, asegurando su relevancia y competitividad en los negocios, así como el impacto y contribución positiva al bienestar social y ambiental.

La construcción de confianza y propósito se convierte en una estrategia integral que beneficia a todos los involucrados, las personas en tanto consumidores, clientes, usuarios, colaboradores, y ciudadanos que conformamos la sociedad en su conjunto. Como dice Aaron Hurst, socio de Almabrands y economista del propósito, “nuestro deseo de impacto, crecimiento personal y comunidad está cambiando el mundo”.