Francisco Valenzuela: Momento de involucrarnos en ciberseguridad

Es un hecho que, entre más conectados estamos, también más expuestos. De esta manera, resulta fundamental concebir una estrategia integral en materias de seguridad digital, que abarque a todo el sector público y privado.

Según datos recopilados por la compañía experta en ciberseguridad Fortinet, Chile fue objetivo de 525 millones de intentos de ataques digitales entre enero y junio de este año, que se sumaron al total de 15 mil millones de intentos en América Latina y el Caribe en el mismo período.

Este elevadísimo número de ciberataques se debe, en gran parte, a la aceleración forzosa de la digitalización a la que nos vimos enfrentados a principio de año, que estimuló la dependencia que veníamos generando hacia las herramientas tecnológicas, creando así la oportunidad perfecta para que los ciberdelincuentes saquen provecho.

Si bien las compañías ligadas a la tecnología y seguridad de datos venimos haciendo énfasis en el tema hace un tiempo, hablar de ciberseguridad no es algo de lo que se tenga real conciencia en todas las industrias. Ese desconocimiento generalizado es lo que lleva a cometer errores que crean vulneraciones en los sistemas, convirtiendo a cualquier negocio o persona en un blanco fácil para un ataque digital.

Un artículo del Foro Económico Mundial (WEF) explica que efectivamente este es el momento en que la ciberseguridad cobra mayor importancia, ya que mientras más necesidad tenemos de las herramientas digitales, más aumentan los costos de algún error.

Asimismo, la incertidumbre del ambiente mundial les da ventaja a los hackers, quienes aprovechan vulnerabilidades humanas para realizar sus estafas.

"La digitalización ya se apoderó del día a día; corresponde hacernos cargo de cuidar de forma responsable todos los datos que estamos enviando y recibiendo de forma constante, incluso en este momento, mientras leemos esta columna."

Finalmente, el hecho de acostumbrarnos a una realidad remota que requiere de una constante conexión a Internet, facilita comportamientos más riesgosos de los usuarios, pues hoy no solo nos conectamos por asuntos del trabajo, sino que además es el medio de reuniones sociales y recreación online.

Antes de la pandemia, la mayor parte de la gente apenas estaba familiarizada con la idea de transformación digital. Términos como phishing, ransomware o malware suenan aún más desconocidos, pero han sido los principales dolores de cabeza de los equipos de informática de todas las industrias afectadas por esos más de 500 millones de ataques digitales en lo que va del año.

Teniendo en cuenta estos potenciales riesgos a los que estamos enfrentados día a día, cabe destacar que actualmente hay una gran disponibilidad de tecnología para hacer frente a estas amenazas.

Existen plataformas de seguridad personalizables que se adecuan a las necesidades de cada empresa, ofreciendo potentes soluciones para proteger toda información de sofisticados cibercriminales, permitiendo incluso, en algunos casos, anticipar posibles ciberataques de manera automática.

La digitalización ya se apoderó del día a día; corresponde hacernos cargo de cuidar de forma responsable todos los datos que estamos enviando y recibiendo de forma constante, incluso en este momento, mientras leemos esta columna.