La búsqueda de soluciones a problemas ambientales trasciende todas las industrias y llega también al mundo agrícola, donde preocupa la erosión de los suelos. Eventos climáticos extremos, operaciones mineras, la deforestación e incendios forestales, entre otros, impactan la fertilidad de la tierra.

La compañía chilena Tequia creó un catalizador capaz de desarrollar fertilizantes para suelos agrícolas a partir de desechos orgánicos, apuesta que acelera los procesos naturales de transformación de la materia orgánica en nutrientes que serán aprovechados para el crecimiento de vegetación.

Con el catalizador TCAS – CATA, la transformación que usualmente es de cuatro meses se reduce a menos de una hora. El mecanismo tiene un impacto directo en el medioambiente, al eliminar la emisión de gases de efecto invernadero.

“Hoy estamos en condiciones de desarrollar fertilizantes a partir de cualquier desecho de la industria, incluso molienda de pescado, cambiando el rumbo de estos desechos y beneficiando los suelos de uso agrícola a partir de la economía circular”, asegura Iván Vega, CEO de Tequia.

El catalizador ha hecho posible recuperar cientos de hectáreas de suelo quemado por incendios forestales y tal ha sido su éxito que ya fue presentada una versión para uso domiciliario, como solución nutricional o potenciador de compostera.

La marca Acer envía un potente mensaje a través del Aspire Vero, que posee plásticos reciclados post consumo en buena parte de su estructura.

Ipsos realizó un estudio que muestra los principales cambios de hábito provocados por la crisis medioambiental en 29 países, incluido Chile.