Chilenos se sienten en general más jóvenes ^Destacado

Para el promedio de los chilenos, la edad en que las personas se dejan de sentir jóvenes es los 46 años, mientras que el momento en que se comienza a sentir la vejez es cuando se cumplen los 56. Esa diferencia, subjetiva por cierto, entre dejar de ser joven y comenzar a ser viejo, resulta de un estudio hecho por Activa Research.

La empresa de investigación encuestó en noviembre de 2018 a poco más de mil personas, comparando luego sus resultados con los obtenidos en sondeos similares realizados en otros 40 países de diferentes continentes.

La edad promedio determinada para Chile, de 46 años, como el momento en que se deja de sentir joven resultó de esta manera levemente superior a la edad promedio mundial, que fue de 43,7 años. Los estudios hechos en 40 países muestran que Paraguay es aquél en que más tarde en la vida las personas dejan de sentirse jóvenes (60,6 años). Filipinas es, en tanto, el lugar donde esto ocurre a una edad más temprana (29,3).

En el caso específico de Chile, un grupo mayoritario de encuestados, correspondiente al 28%, señaló que se dejan de sentir jóvenes entre los 31 y los 40 años, mientras que un grupo levemente menor, el 24%, dijo que eso le ocurre entre los 41 y los 50.

Baja preocupación por ancianos

La vejez se comienza a sentir, por otra parte, en Chile a partir de los 56 años, edad que está en línea con el promedio global. Este, según los sondeos realizados por empresas que, al igual que Activa Research, pertenecen a la Red mundial independiente de investigación de mercado, WIN, es de 55 años.

De acuerdo con ellos, el país en que más tarde se comienza a sentir la vejez es Italia, donde este proceso ocurre en promedio a los 70 años. Por el contrario, donde el fenómeno es más temprano es en China, a los 44,2 años promedio.

En el caso chileno, para un grupo mayoritario, de 25% de encuestados, la edad en que comienza la sensación de vejez se encuentra entre los 41 y 50 años, mientras que para el 22% esta edad está entre los 51 y los 60.

Aparte de esta inquietud, el estudio consultó acerca de la percepción que tienen las personas respecto de la preocupación de la sociedad actual por los ancianos y por los jóvenes. Las respuestas fueron bastante categóricas.

Solo un 8% piensa que la sociedad se preocupa lo suficiente por los ancianos. Los jóvenes tendrían en este sondeo una mejor suerte, si es que puede hablarse en esos términos. La percepción sigue siendo deficitaria, pues solo el 24% ve preocupación por este grupo.